Pfizer, en el banquillo de los acusados
- Irene Cuesta
Ocurrió hace más de diez años. En 1996, en el Estado nigeriano de Kano se había producido una epidemia de meningitis que afectaba sobre todo a la población infantil. Por entonces, la multinacional farmacéutica más poderosa del planeta, Pfizer, se disponía a comercializar un antibiótico denominado Trovan (trovafloxacino). Era una gran oportunidad de probar in situ el preparado destinado al mercado occidental. Pese a que las organizaciones humanitarias consideraron antiético el experimento, la firma estadounidense no dudó en aprovechar la coyuntura: epidemia vírica severa, población necesitada de recuperar su salud y una empresa deseosa de probar su medicamento en las “mejores” condiciones y con el menor coste. La administración de este medicamento a unos 200 niños pudo ser la causa de la muerte de, al menos, once de ellos, mientras que decenas sufrieron graves daños, como dolencias cerebrales, ceguera o sordera, entre otros.
A finales de diciembre del año pasado, un tribunal de justicia nigeriano ordenó el arresto de tres directivos de Pfizer, entre los... continuen leyendo
No hay comentarios.:
Publicar un comentario